¿QUÉ TIPO DE UTENSILIO ES USTED?
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De acuerdo a lo que dice las sagradas escrituras, usted debe tener definido qué clase de utensilio es, y para qué sirve, o todavía es “el barro en las manos del alfarero,” a pesar de los años, y su larga trayectoria dentro del Evangelio.
El Apóstol Pablo, le menciona a Timoteo, que en una casa grande se utilizan cuatro tipo de elementos, y para diferentes funciones, ya sea para honra, o usos viles; 2º Tim.2:20, todos estos artefactos fueron tomados y puestos en las manos de la persona que les daría la forma y modelo final, cuando aún estaban en su estado natural, y sin forma alguna. Así también le sucede a la persona que acepta a Cristo como su salvador personal, el Espíritu Santo comienza el proceso de elaboración, y que finalmente lo presenta al Padre como un producto terminado, para ser ahora utilizado en el área que el Señor determine, y conforme a su capacidad y rendimiento.
Los utensilios como: oro, plata, barro y madera, son los mencionados en el nuevo testamento, para honra, o deshonra.
Algunos creyentes piensan que una menor responsabilidad en Cristo, menor es el compromiso, esto es un error, porque tenemos el ejemplo de la entrega de los talentos, y todos debían, y tenían una cuenta que dar al Señor que los comprometió; es por esta situación real, que debemos saber cual es nuestra especialidad o vocación dentro de los caminos del Señor, porque si queremos hacernos los humildes, y engañarnos a nosotros mismos cantando el que a muchos le gusta tanto” Tú el alfarero, y yo el barro soy,” estaremos siempre evadiendo la voluntad de Dios que quiere limpiarnos para que llevemos más fruto, y no estar vegetando en forma híbrida.
Ahora ¿Qué tipo de utensilio es usted en esta casa grande? Para saberlo hay que preguntarle a Dios en oración, y pedirle que seamos para usos de honra, porque si usted no lo sabe, o no se ha dado cuenta, que en el cielo no se menciona el barro y la madera, se señalan los elementos de mucho valor, como el oro, y las piedras preciosas como los diamante.
Si todavía no está conforme a lo antes mencionado, el Señor Jehová le dice a su pueblo Israel” mía es la plata, y mío es el oro” Hageo 2:8, por lo tanto en esta casa grande, Dios usará para honra los utensilios de oro y plata, y los tendrá en alta estima debido a la resistencia del material que están hechos, y al duro proceso que lo han sometido y en grandes exigencias, y altísimas temperaturas que debieron soportar en el crisol.
El creyente que sea de honra en el Evangelio de Cristo, debe tener claro que es un elemento de mucho valor, y que jamás olvide que aunque sea de plata o de oro, seguirá siendo un depósito de barro, para que la excelencia del poder sea de Dios, y no de nosotros. 2ºCor.4:7
Cuando el Señor Jesucristo vuelva a buscar a los suyos, nos alzaremos inmediatamente hacia ÉL, como un especie de imán, que al pasar cerca de los metales, no todos de adhieren o son atraídos por el magnetismo, sólo lo hacen algunos. Así también será cuando el gran acontecimiento suceda, no todos los “creyentes” se alzarán a reunirse con Jesús.
Preocúpese ahora de saber de qué material está hecho, porque de otra forma ya sabe lo que le sucederá.
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De acuerdo a lo que dice las sagradas escrituras, usted debe tener definido qué clase de utensilio es, y para qué sirve, o todavía es “el barro en las manos del alfarero,” a pesar de los años, y su larga trayectoria dentro del Evangelio.
El Apóstol Pablo, le menciona a Timoteo, que en una casa grande se utilizan cuatro tipo de elementos, y para diferentes funciones, ya sea para honra, o usos viles; 2º Tim.2:20, todos estos artefactos fueron tomados y puestos en las manos de la persona que les daría la forma y modelo final, cuando aún estaban en su estado natural, y sin forma alguna. Así también le sucede a la persona que acepta a Cristo como su salvador personal, el Espíritu Santo comienza el proceso de elaboración, y que finalmente lo presenta al Padre como un producto terminado, para ser ahora utilizado en el área que el Señor determine, y conforme a su capacidad y rendimiento.
Los utensilios como: oro, plata, barro y madera, son los mencionados en el nuevo testamento, para honra, o deshonra.
Algunos creyentes piensan que una menor responsabilidad en Cristo, menor es el compromiso, esto es un error, porque tenemos el ejemplo de la entrega de los talentos, y todos debían, y tenían una cuenta que dar al Señor que los comprometió; es por esta situación real, que debemos saber cual es nuestra especialidad o vocación dentro de los caminos del Señor, porque si queremos hacernos los humildes, y engañarnos a nosotros mismos cantando el que a muchos le gusta tanto” Tú el alfarero, y yo el barro soy,” estaremos siempre evadiendo la voluntad de Dios que quiere limpiarnos para que llevemos más fruto, y no estar vegetando en forma híbrida.
Ahora ¿Qué tipo de utensilio es usted en esta casa grande? Para saberlo hay que preguntarle a Dios en oración, y pedirle que seamos para usos de honra, porque si usted no lo sabe, o no se ha dado cuenta, que en el cielo no se menciona el barro y la madera, se señalan los elementos de mucho valor, como el oro, y las piedras preciosas como los diamante.
Si todavía no está conforme a lo antes mencionado, el Señor Jehová le dice a su pueblo Israel” mía es la plata, y mío es el oro” Hageo 2:8, por lo tanto en esta casa grande, Dios usará para honra los utensilios de oro y plata, y los tendrá en alta estima debido a la resistencia del material que están hechos, y al duro proceso que lo han sometido y en grandes exigencias, y altísimas temperaturas que debieron soportar en el crisol.
El creyente que sea de honra en el Evangelio de Cristo, debe tener claro que es un elemento de mucho valor, y que jamás olvide que aunque sea de plata o de oro, seguirá siendo un depósito de barro, para que la excelencia del poder sea de Dios, y no de nosotros. 2ºCor.4:7
Cuando el Señor Jesucristo vuelva a buscar a los suyos, nos alzaremos inmediatamente hacia ÉL, como un especie de imán, que al pasar cerca de los metales, no todos de adhieren o son atraídos por el magnetismo, sólo lo hacen algunos. Así también será cuando el gran acontecimiento suceda, no todos los “creyentes” se alzarán a reunirse con Jesús.
Preocúpese ahora de saber de qué material está hecho, porque de otra forma ya sabe lo que le sucederá.
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